MANIFESTACIÓN 4 DE DICIEMBRE
18.30 San Juan de Dios (Ayuntamiento / Cádiz)
El martes 4 de diciembre, los estudiantes andaluces salimos a la calle
para decir, ¡BASTA! Basta de recortes en educación, en sanidad, en
derechos... no aceptamos ninguna pérdida más bajo ninguna excusa. Los estudiantes nos posicionamos en contra de todos los recortes: ya sean del gobierno central del PP o del autonómico PSOE+IU. En
esta fecha tan simbólica para Andalucía, queremos señalar el daño que
los recortes del gobierno andaluz nos están haciendo en el ámbito
educativo (aunque no es el único). Las diferentes organizaciones
estudiantiles existentes en nuestra comunidad lanzamos esta convocatoria
para decir que ningún recorte es inevitable, que no tenemos que pagar una deuda ni una crisis de la que no somos responsables a costa de nuestro presente y nuestro futuro.
Andalucía: ¿gobierno-muralla frente a los recortes?
PSOE:
es responsable de la política llevada a cabo durante el gobierno de
Zapatero (rescate bancario, sistema fiscal desfavorable para lxs
trabadorxs y favorable para las clases altas, reforma de la Constitución
por parte del PPSOE). Sus políticas le han allanado el camino al PP,
legitimando los recortes
IU: es responsable de entrar en un gobierno, cuyos “efectos
colaterales” eran ya conocidos. La austeridad de izquierdas es también
austeridad, es gobernar contra l@s trabajador@s.
Además,
este gobierno andaluz mintió, ya que aseguró que la educación
no estaría sujeta a recortes, que sería una materia “intocable”. Ahora
bien, pasemos a ver en que han quedado estas palabras y las medidas
concretas que el gobierno andaluz lleva a cabo en educación...
- Aplicación de las medidas del gobierno central:
No hay recortes inevitables, la desobediencia ante las injusticias es un
deber que está por encima de cualquier ley. Para el PSOE e IU, parece
más importante acatar la ley que hacer una oposición real de izquierdas
al gobierno central y a los dictados de la Troika.
De este modo, vemos como en nuestra comunidad también se aplican las
medidas que están llevando al desmantelamiento de la educación pública
(ya antes, con importantes limitaciones): pérdida de democracia en la
universidad, aumento de la financiación privada con todo lo que ello
implica, subida de tasas (aunque en las primeras matrículas no, debido a
la lucha tan fuerte que el movimiento estudiantil protagonizó en
Andalucía el curso anterior: la lucha sí sirve), endurecimiento de los
requisitos para conseguir becas (este año 90%, previsiblemente el que
viene 100%), aplicación de la ley Wert en las enseñanzas medias
trasladando el modelo privatizador y no democrático que sufre
la universidad a las enseñanzas medias...
- Aumento del número de alumnos por clase en primaria y secundaria.
Esta establecido que las clases deben ser, cómo máximo, de 25 alumnos en
primaria y 30 en secundaria. Sin embargo, la legislación da un margen
del 10%. El gobierno andaluz dice que no ha aumentado el número de
alumnos por clase, pero en la práctica sí que lo ha hecho, ya que se ha
sujeto a este 10% generalizándolo en casi la totalidad de aulas.
Ya sabemos que en clases masificadas, nuestros estudios pierden calidad,
el profesor puede dedicarnos menos atención, etc.
- El despido en la práctica de 4.500 interinos al elevar el número de horas lectivas a dos más.
Es decir, hacemos que nuestros profesores y profesoras trabajen dos
horas más y, como consecuencia, nos sobran profesores y dejamos sin
trabajo a más de cuatro mil personas, además de la pérdida de calidad en
la educación que los estudiantes recibimos. Esto también supone
desatender tareas tan importantes como desdobles, apoyos,
grupos flexibles, atención a la diversidad...
Mientras que en Castilla y León, se ha optado por dedicar esas dos horas
“impuestas” desde el gobierno central para dedicarlas a atender esas
tareas para las que nunca hay tiempo (preparación de clases, diversidad,
innovación...), Andalucía prefiere despedir y elevar las cifras de
desempleo.
- Mantenimiento de conciertos educativos
Desviando
dinero público para centros privados que, en muchos casos, reproducen
roles sexistas con división entre hombres y mujeres. Tenemos de este
modo centros públicos privados de fondos públicos, y centros privados
dotados de fondos públicos.
- Reducción salarial a los profesores
Haciendo
caer sobre espaldas de los trabajadores y las trabajadoras públicas
la responsabilidad de una crisis que no han generado ell@s. La junta
quitará el próximo año entre 1200 y 2000 euros de salario a los
profesores.
- Mantiene la subcontratación en los centros públicos
Tanto
institutos como universidad (comedores, transporte escolar, plan
de acompañamiento, limpieza, monitores de educación especial,
administrativos...). Estxs trabajadorxs, mayoritariamente mujeres, están
obligadas a realizar su trabajo en unas condiciones de precariedad
absolutas, con el incumplimiento de convenios ya de por sí injustos,
despidos por represión sindical, por embarazos, etc. incluso con
impagos. De este modo, vemos como el gobierno autonómico privatiza
ámbitos de nuestros centros de estudios “públicos”. El gobierno andaluz
es quien contrata a estas empresas y permite que estas personas trabajen
en estas condiciones. Este es el caso de las limpiadoras de la UCA, cuya
empresa Intelimp no cumple el pliego de condiciones acordado, y el
rector y la Junta de Andalucía son cómplices de esta situación de
precariedad y explotación a las que estas trabajadoras se ven sometidas.
No hay dinero para Educación, sí lo hay para los bancos
Además de todo esto, tenemos actualmente
en nuestra ciudad dos conflictos importantísimos que nos fectan de
lleno como estudiantes: es el caso de la Escuela Superior de Ingeniería y de laEscuela de Hostelería Fernando Quiñones. La situación
de los estudiantes de ingeniería y hostelería son consecuencia directa
de los recortes en educación, que impiden que estos alumnos tengan unas
instalaciones adecuadas en las que impartir sus estudios.
De este modo, vemos como las instituciones no nos solucionan nuestros problemas como
estudiantes. No nos la solucionan cuando se dedican a rescatar bancos y
a gestionar la crisis haciéndonosla pagar a los de abajo, entre los que
nos encontramos los y las estudiantes. De este modo, la lucha es el
único camino. Solo la lucha sostenida en el tiempo, señalando a todos
los responsables de la actual situación, podrá cambiar el actual
panorama haciendo que seamos cada vez más fuertes hasta conseguir
victorias. Ya lo demostramos el año anterior con la lucha contra la
subida de tasas, que si bien no fue una victoria total, conseguimos
contenerla en las primeras matrículas, ya lo han demostrado los
trabajadores de URBASER en Jerez que, tras 20 días de huelga, han
conseguido parar los despidos
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